1. Adición y eliminación de beneficiarios (nacimiento o fallecimiento en la familia, etc.)
Los eventos significativos de la vida pueden ciertamente ser abrumadores. En particular, el nacimiento y la muerte de los miembros de la familia pueden crear una larga lista de tareas pendientes y ocupar una gran cantidad de capacidad intelectual. Algo para agregar a su lista: actualice su plan de patrimonio. Ya sea un fideicomiso (revocable o irrevocable), última voluntad y testamento u otro documento de planificación patrimonial, es esencial mantener sus últimos deseos actualizados.
Aquellos con hijos adoptivos y/o hijastros también querrán revisar los documentos de planificación patrimonial cuando den la bienvenida a dichos miembros de la familia en su vida. La muerte del intestado, en la que uno muere sin testamento o sin un testamento válido, deja la distribución de sus activos a la ley estatal. Debido a que existe la posibilidad de que los parientes que no son de sangre (especialmente los hijos de crianza y los hijastros) no sean reconocidos como herederos legales según la ley estatal, es más seguro incluirlos en su testamento de acuerdo con sus preferencias de distribución.
2. Cambio en el estado civil
Uno de los principales conflictos de la planificación patrimonial que se debe evitar es el no retirar a un ex cónyuge o pareja de los documentos cuando se hayan separado. Tenga en cuenta que, en caso de divorcio, su plan de patrimonio debe actualizarse una vez que se finalice el acuerdo de divorcio. Las leyes estatales varían con respecto al tratamiento de los ex cónyuges, pero siempre es más seguro mantener su plan lo más actualizado posible.
Alternativamente, si tiene una pareja que le gustaría incluir como beneficiario y no está casado legalmente, es vital que tome los pasos para incluir a este ser querido en su plan de patrimonio.
3. Adquisición de activos
Si recientemente se convirtió en propietario o adquirió un activo valioso – ¡Felicidades! En lo que se refiere a la planificación patrimonial, es esencial que mantenga un registro preciso y organizado de cualquier propiedad y otros artículos de alto valor bajo su propiedad. Los activos se pueden distribuir de varias maneras (por ejemplo, a través de fideicomisos y testamentos), y depende de usted cómo se transferirán estos activos al momento de su muerte. La actualización de sus documentos de planificación patrimonial implica reevaluar los activos que posee, lo que no se limita a bienes raíces. Puede actualizar su plan de patrimonio para designar qué beneficiarios heredarán otros activos, como vehículos, reliquias familiares, fondos y equipo especial.
4. Chequeos de rutina
Adquiera el hábito de revisar sus documentos de planificación patrimonial. Algunos prefieren revisar sus documentos de planificación patrimonial anualmente (algunas veces varias veces al año), mientras que otros actualizan su plan con menos frecuencia o según sea necesario.
Los cambios en las leyes fiscales estatales o federales pueden afectar sus elecciones de distribución de bienes. Con el tiempo, es posible que también tenga un cambio de perspectiva con respecto a los procedimientos o tratamientos médicos incluidos en su directiva avanzada. En cualquier caso, es muy recomendable asegurarse de que su plan de patrimonio sea siempre un fiel reflejo del resultado deseado.
La información de este artículo se ofrece solo con fines educativos y no constituye asesoramiento jurídico. Para obtener ayuda específica, consulte con un abogado autorizado en su jurisdicción.