4 maneras de limitar los riesgos de planificación patrimonial
Aunque la planificación patrimonial implica enfrentar temas difíciles como la muerte y la incapacidad, crear un plan patrimonial no es necesariamente un negocio arriesgado. Un motivador principal para la planificación patrimonial es el deseo de asegurar que los seres queridos sean atendidos después de la muerte de uno y que se implementen las adaptaciones al final de la vida. La planificación patrimonial incompleta o desatendida puede poner en peligro estos deseos. Para minimizar estos riesgos, considere lo siguiente:
1. Reconozca sus necesidades personales de planificación patrimonial
Contrariamente a la suposición popular, la planificación patrimonial no solo gira en torno a la herencia, la propiedad y los activos. La planificación patrimonial también es una forma de asegurar sus preferencias de tratamiento médico al final de su vida, expresar sus designaciones de tutela y continuar con un legado familiar.
Es posible que le falte dirección cuando comience su viaje de planificación patrimonial. Es útil reflexionar sobre los resultados deseados de su plan, que pueden variar de persona a persona. Por ejemplo, las personas con hijos pueden optar por dejar atrás las instrucciones de cuidado de niños, un fideicomiso o un mensaje personal a sus seres queridos sobrevivientes, que pueden integrarse en un plan patrimonial personalizado.
2. Conozca la diferencia entre un fideicomiso revocable e irrevocable
Uno de los beneficios de tener un fideicomiso es la garantía de que los fondos o activos contenidos en el fideicomiso se utilizarán para el propósito previsto. Por ejemplo, uno puede elegir designar una cierta cantidad de fondos para los gastos de educación de su hijo una vez que el beneficiario alcanza cierta edad. Los términos de un fideicomiso revocable se pueden revisar a lo largo de la vida del creador de confianza (también conocido como “otorgante”), mientras que los términos de un fideicomiso irrevocable no se pueden cambiar una vez que se crean.
Tenga en cuenta que la existencia de cualquier forma de confianza no elimina la necesidad de un testamento. Un plan patrimonial equilibrado y completo utilizará múltiples documentos de planificación patrimonial para cubrir todo el terreno y garantizar que se cumplan los deseos de uno.
3. No dude en buscar asistencia
Si ya ha creado documentos de planificación patrimonial o aún no ha dado el salto, es natural tener preguntas o incertidumbres con respecto a la planificación de su futuro. En comparación con los planes patrimoniales creados con la ayuda de un profesional, es probable que los planes patrimoniales de bricolaje estén plagados de errores y puedan omitir detalles importantes. Debido al grado de importancia detrás de las decisiones de planificación patrimonial, no hay espacio para dejar que los fondos o preferencias se escapen. A menudo, los beneficiarios se enteran de los errores de planificación patrimonial solo después de que es demasiado tarde.
4. Seleccione y revise cuidadosamente las designaciones de beneficiarios
Las designaciones de beneficiarios pueden cambiar con el tiempo. Por esa razón, es esencial revisar sus designaciones periódicamente para asegurarse de que su patrimonio caiga en las manos correctas. Los nacimientos o muertes en la familia, los cambios en el estado civil y los cambios en las relaciones son razones por las cuales uno puede cambiar a sus herederos elegidos.
Además, revisar a sus beneficiarios también puede permitirle espacio para preparar a sus seres queridos para el manejo de su patrimonio. Al mantener una línea de comunicación abierta con respecto a su plan patrimonial, puede reducir el riesgo de desacuerdo y confusión entre sus seres queridos.
La información de este artículo se ofrece solo con fines educativos y no constituye asesoramiento jurídico. Para obtener ayuda específica, consulte con un abogado autorizado en su jurisdicción.